LOS BAUTISTAS
Nuestra denominación bautista surgió a principios del siglo XVII en Holanda, a raíz de la Reforma Protestante que sacudió Europa en el siglo anterior, y se extendió rápidamente por el norte de Europa. Los flujos migratorios de la época llevaron también la fe bautista hasta el continente americano, la cual fue esparcida por los ingleses y holandeses que emigraron y se establecieron, alcanzando también a las comunidades africanas que llegaron bajo el yugo de la esclavitud.
Hablar de evangélicos bautistas en Europa, es hablar de libertad religiosa, de tolerancia y de servicio a la comunidad. Nuestras universidades, escuelas, hospitales, residencias de ancianos, programas a la niñez, son referentes a nivel internacional. Así mismo los evangélicos bautistas somos pioneros en la integración y ordenación de la mujer en el ministerio pastoral.
En la década de 1.870 comenzó la implantación de Iglesias Bautistas en España. El 6 de Enero de 1893 apareció EL ECO como revista de difusión bautista genuinamente española, revista que se mantiene hasta ahora. En 1923 se adoptó el nombre de Unión Evangélica Bautista Española y en 1928 tuvo lugar la primera Convención de este grupo de Iglesias. Actualmente, la UEBE dispone de 120 lugares de culto en territorio español y cuenta con unos 10.000 miembros.
La Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España (FEREDE), es una federación que aglutina a las entidades religiosas evangélicas a los efectos de su relación con la Administración del Estado y la promoción y defensa de los derechos relacionados con la libertad religiosa. Tras el reconocimiento del Protestantismo como religión con notorio arraigo en España, la FEREDE suscribió con el Estado un Acuerdo de Cooperación que fue aprobado por la ley 24/1992.
Aunque queda mucho por hacer en materia de libertad religiosa en nuestro país, los bautistas seguimos luchando para hacer visible a la sociedad nuestro compromiso con ella. No podemos ser indiferentes a nuestro entorno. Somos una comunidad abierta para todo el mundo, que trabaja al servicio de niños, de ancianos, de extoxicómanos, de necesitados de alimento o abrigo... Pero sobretodo, somos personas que desean compartir el mensaje de esperanza en Cristo que ha transformado nuestras vidas.